¿Qué problemas pueden generar las mascotas en las propiedades de vecinos?

Los conflictos son numerosos, y se producen por molestias, fundamentalmente, de los perros por los ladridos, excrementos en zonas comunes, pelos, olores, perros sueltos por zonas comunes y de raza potencialmente peligrosa sin bozal.
El resto de mascotas, como gatos, pájaros o hamster, entre otros, producen bastantes menos molestias, y estas suelen ser por olores más que por ruidos.
Los ruidos y olores producidos por mascotas son consideradas actividades molestas, ya que los propietarios u ocupantes de un inmueble no pueden desarrollar acciones que sean contrarias a las normas sobe actividades molestas, insalubres, o nocivas.
¿Cómo actuar antes situaciones? Lo primero es recurrir al diálogo con el responsable de la mascota, y si no se resuelve el problema, el presidente/a de la comunidad requerirá, fehacientemente, el cese de la molestia a la persona dueña de la mascota. Si tampoco es efectivo, queda la vía judicial, y entre las medidas que el juez puede acordar estarían los collares anti ladridos, o trasladar la mascota a otro lugar dsitinto de la vivienda, y en casos extremos, puede llegar a prohibirse el uso de la vivienda al propietarioa/a por un tiempo limitado.